Cuando ella se levantó se dio cuenta de que algo había cambiado, por primera vez en mucho tiempo no abrazó el cojín del lado izquierdo de su cama. Mientras se duchaba, se preguntaba qué había cambiado, le faltaba algo y no sabía el qué. Se hizo café, de ese casero que deja un olor maravilloso en toda la casa, intentó recordar en qué solía pensar mientras desayunaba pero algo fallaba, mordía una tostada riquísima y ese pensamiento recurrente había desaparecido. Decidió vestirse y empezar el día sin pensar más en ello, seguro que cuando menos se lo esperara, la respuesta llamaría a su linda cabecita. Abrazos mañaneros, clases interesantes, apuntes, café malo de máquina y cuando volvía para casa escuchó esa canción, su canción y se dió cuenta, lo que le había faltado esa mañana era acordarse de él, qué raro ¿no? No conseguía explicarse cómo después de tanto tiempo, su recuerdo se había esfumado y la necesidad de mirar su foto era más que mínima. Por la noche, después de muchas hipótesis, él la llamó para contarle qué había hecho y cómo le había ido el día, fue justo en ese mismo momento cuando ella halló la respuesta, ya no le quería. Sus ideas no le gustaban, su comportamiento era estúpido y por primera vez en mucho tiempo, no le miraba con los mismo ojos, el superhéroe que ella se había creado estaba desapareciendo poco a poco, nada era como antes. Cuando colgó, no pudo evitar echarse a llorar, ¿qué le estaba pasando? Si no era capaz de quererle a él, su hombre ideal, ¿alguna vez volvería a amar?
1999 (Lol): me gusta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario